Barras Especiales - Armaduras Galvanizadas

DESCRIPCIÓN

Las armaduras han recibido un tratamiento superficial, anticorrosivo, constituido por un recubrimiento de zinc, realizado mediante inmersión en un baño de dicho metal fundido a 450 ºC.

Responden a la norma

CARACTERÍSTICAS

Ventajas de armaduras galvanizadas

Mayor protección de las armaduras

En ambientes marinos o con fuerte presencia de contaminantes en la atmósfera, el recubrimiento galvanizado proporciona a la armadura de acero una protección triple contra la corrosión:

Protección por efecto barrera, aislándole del medio agresivo.

Protección catódica. El zinc constituirá la parte anódica de las pilas de corrosión que puedan formarse, y se irá consumiendo lentamente para proporcionar protección al acero.

Restauración de zonas desnudas. Los productos de corrosión del zinc, taponan las pequeñas discontinuidades que puedan producirse en el recubrimiento por causa de la corrosión o por daños mecánicos (golpes, arañazos, etc.).

 

Mayor fiabilidad y durabilidad del hormigón

Aumento de la fiabilidad del hormigón armado en cuanto a su comportamiento en ambientes agresivos.

Eliminación del riesgo de desconchado de la capa de hormigón que cubre las armaduras, como consecuencia del aumento de volumen provocado por la corrosión, garantizando el espesor de recubrimiento.

Mayor tolerancia del hormigón armado frente a las desviaciones de formulación y ejecución, que provocan pérdida de compacidad, como pueden ser una relación demasiado alta agua/cemento, o un vibrado deficiente.

No necesita mantenimiento, en comparación con otros tratamientos frente a la corrosión.

 

Económicas

Según estudios realizados por el INSTITUTO de CIENCIAS de la CONSTRUCCIÓN EDUARDO TORROJA, las armaduras galvanizadas duplican, como mínimo, la vida útil de la construcción (bibliografía ³).

Es fácilmente disponible, ya que parte de Armaduras Industriales Elaboradas o Armaduras Prefabricadas, y constituye un tratamiento de uso extendido.

Eliminación de costes derivados de reparaciones y sus consecuentes tiempos fuera de servicio, ya que una vez iniciado el proceso de corrosión de las armaduras del hormigón, su reparación es técnicamente difícil y económicamente costosa.

Además hay estructuras que si se deterioran impidiendo su uso o deben rehabilitarse, crean una situación crítica (por ejemplo: el colapso que se originaría cuando el único acceso existente a un lugar, quedara fuera de servicio).

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